Ya estamos en 2022, a 114 años desde el acontecimiento que dio origen a esta efeméride: la huelga en 1908 que reivindicaba mejoras en las condiciones laborales en la empresa Cotton de Nueva York y el posterior incendio que causó la muerte de más de un centenar de mujeres, la gran mayoría de ellas inmigrantes y jóvenes. Hemos cambiado de milenio y ha pasado largamente más de un siglo desde dicha tragedia, sólo hemos avanzado un poco a través de muchas luchas desde las organizaciones, la academia y los sindicatos, y lo cierto es que la igualdad de derechos entre los distintos géneros no es una realidad en ninguna parte del mundo.
Como Asociación Latinoamericana de Abogadas y Abogados Laboralistas (ALAL), no estamos conformes con lo poco avanzado. Tampoco queremos esperar otro siglo para que el derecho a la seguridad económica y una mejor calidad de vida, sean reconocidos y respetados por todas, todos y todes.
Esta fecha histórica se presenta como una oportunidad para seguir visibilizando las falencias que se mantienen, dada la cultura patriarcal que sigue imperando en todo el mundo, basada en estereotipos binarios, que asignan a mujeres y disidencias la carga de sostener el trabajo reproductivo o trabajos de cuidado. La violencia machista en todas sus formas y expresiones: sexual, social, cultural, política y económica sigue siendo intolerable. Nuestro compromiso como ALAL es seguir trabajando cada día por erradicar la violencia de género, las brechas y discriminaciones en el mundo del trabajo, a fin de lograr iguales oportunidades para todas las personas.
La Organización de Naciones Unidas puso como lema de este año “Igualdad de género hoy para un mañana sostenible”, porque es fundamental que la vida en equilibrio con los ecosistemas, considere a todas, todos y todes, de otro modo la supervivencia es insostenible. Las diferencias que afectan a las mujeres y disidencias se dan en todos los escenarios y esferas de la vida: especialmente en las migraciones y desplazamientos que generan la pobreza y las guerras; en las necesidades de cuidados de niñas, niños, ancianas y ancianos, personas en situación de discapacidad y problemas de salud que siguen a cargo de las mujeres; en las tareas de teletrabajo de la actual modernidad castiga a las mujeres y sus familias; en los espacios de participación y cargos de toma de decisiones que siguen estando tan lejos de la Paridad.
Las organizaciones de abogadas y abogados laboralistas de Latinoamérica estamos comprometidas a aportar para avanzar en la paridad de género como piso; en Igualdad de oportunidades y de derechos para todos, todas y todes; y en la erradicación de toda violencia de género.
En Latinoamérica, 8 de Marzo de 2022.
Por el Comité Ejecutivo de la ALAL